Jimmy Wales, fundador de Wikipedia. (Foto GDFL vía Wikimedia Commons) |
En un post en Quora, el fundador de Wikipedia, Jimmy Wales, ha estallado contra la homeopatía.
Wales se enfureció cuando un farmacéutico de Londres quiso venderle, en lugar de unas pastillas con benzocaína para calmar la tos, un preparado llamado Oscillococcinum del que ya hemos hablado aquí. Sabiendo que "la homeopatía es un fraude probado", Wales relata cómo escuchó al farmacéutico decirle que "si tomaba Oscillococcinum, destruiría el ADN del virus antes de que pudiera enfermarme".
Y continúa diciendo: "Bien, ese tipo de mentira es lo que me enferma". Procede entonces a explicar cómo el Oscillococcinum es un producto "completamente falso".
Lo que se pregunta Jimmy Wales es "¿por qué es legal esto? O, si no es legal, ¿qué se puede hacer al respecto?" Para ilustrar la gravedad del asunto, cita un artículo de The Guardian donde se dice que sólo el 50% de los adultos mayores del Reino Unido se aplicaron la vacuna contra la gripe y pregunta: "¿Cuántos del otro 50% optaron por no aplicársela porque creyeron que este remedio falso los protegería? ¿Y cuántos de ellos murieron?"
La conclusión de la entrada de Wales merece atención especial, porque refleja la inquietud de muchas personas, ciudadanos simples, médicos y científicos al confrontar los datos reales sobre la implausibilidad de la homeopatía y la ausencia de pruebas de su eficacia en más de 220 años desde que Samuel Hahnemann la inventó: "¿Con quién debo hablar sobre esto para animar la creación de una campaña para detener esto? No es mi área de interés principal así que no soy la persona correcta para liderar esto personalmente. Pero me gustaría ayudar".
Los comentarios a esa reflexión de Wales (45 al momento de escribir esta entrada) rápidamente le enseñaron a quiénes dirigirse. A Ben Goldacre, autor de Malaciencia, a Simon Singh y a Edzard Ernst, tres personas que concitan el odio babeante de quienes viven del engaño y de sus acólitos precisamente porque han sido eficaces en la lucha contra los fraudes a la salud en el Reino Unido.
Por desgracia, Jimmy Wales parece no estar consciente de la intensa labor que la Wikipedia en español hace para promover todo tipo de supercherías a cual más disparatada. Y eso que desde noviembre "coincidentalmente" le han metido mano a todos los artículos que denunciábamos aquí por entonces. Ya habrá tiempo de reseñar los cambios y otros problemas que tiene la versión en nuestro idioma de la enciclopedia iniciada por Wales.
Cuando hemos hablado aquí de la Wikipedia en español y de su claro sesgo en favor de las pseudociencias, la charlatanería, lo supuestamente paranormal, misterioso y sobrenatural, hemos recibido todo tipo de ataques. Incluso en la propia Wikipedia se han tomado la molestia de atacar al autor de este blog:
Lo cual es más fácil de decir que aceptar que a la Wikipedia en español le importa un pepino la ciencia, el conocimiento, los hechos que, más allá de las opiniones, nos dicen que las pseudoterapias que no funcionan siguen sin funcionar. A mí, por supuesto, me importa mucho, porque creo que los hispanoparlantes (500 millones) merecemos una Wikipedia decente y fiable, con más voluntarios y menos dictadorzuelos, con más ciencia y menos pseudociencia, con más datos y menos opiniones, con más seriedad y menos berrinchitos. Y porque aplaudí la iniciativa de Wales cuando aún no existía este blog.
Al final, estamos luchando junto a Jimmy Wales, desde esta minúscula trinchera, para crear una campaña que detenga los daños que causan las prácticas pseudomédicas. Aunque sea, paradójicamente, luchando contra el relativismo postmodernista de la Wikipedia en español. Y contra su idea de que es igualmente válido y merecedor de lugar en la enciclopedia la teoría de la tierra plana que la de la tierra esferoidal, la medicina y la química que la homeopatía, de la que no se atreven a decir, simplemente, "es un fraude probado".
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Actualización 2 de febrero, mediodía: Hora y pico después de publicar esta entrada, por Twitter, una persona que dice ser "administrador de @Wikinoticias" y editor de Wikipedia (como siempre, esto no se sabe, igual es otra persona suplantándolo y de ser así por supuesto que rectificaré), en vez de atender a lo dicho por Wales, a los ejemplos, argumentos y hechos que hemos presentado aquí en tres entradas, prefirió el ataque personal:
Le expliqué que no, no vivo de esto, que esto ni es negocio ni se hace por negocio y que sacar tan tonta conclusión porque tres de las 600 entradas que tiene este blog son sobre Wikipedia es halagarse demasiado. Lo siguiente fue decir que no se puede hablar conmigo por "mis antecedentes" (que nunca me dijo cuáles eran, el tema parecía fascinarle a él, a mí no tanto). Y sí, no habló conmigo, pero contra mí sí, parece que le resultaba importante. Pedí reiteradamente que atendiera a los problemas de la enciclopedia en la que participa en vez de celebrar su popularidad (que poca le puedo dar) recibí la siguiente recomendación:
Aclaré que los estudios existentes (Aurelio Asiáin desde Japón rápidamente aportó el enlace, que es este artículo de Wired) indican que no hay enciclopedias sin errores, pero que la fiabilidad de la Wikipedia en inglés es equivalente a la de la Encyclopaedia Britannica, mientras que por nuestro lado hispanohablante, otros estudios indican que la Wikipedia en español es la menos fiable. Así que invitarme a mí a que no la lea no resuelve nada. Expliqué:
Después de una pila más de descalificaciones y cierre a cualquier ejercicio de autocrítica, llegó la invitación a la censura no sólo dentro de Wikipedia (donde se me dijo que antes de editarla hay que pedirle permiso a los jefes en la página de discusión de cada tema, lo cual quizá explica mucho pero no tiene que ver con el proyecto original de Wales) sino en Twitter y en mi blog.
Las esperanzas que tenemos de que los voluntarios de Wikipedia resuelvan los graves problemas denunciados sobre ella (y no sólo por este blog de cuarta escrito por un don nadie sin título universitario, como los wikipedistas gustan de recordar sobre mí, porque para eso sí tienen tiempo, pero no para anotar en su mamotreto que las constelaciones familiares son un timo) son pocas, pues. Y las esperanzas de que otros voluntarios nuevos, frescos y abiertos puedan participar y compartir lo que claramente son cotos de poder bien divididos que dan ego trips y sentimiento de dominio, son menos.)