Nota del 3 de enero de 2014: La página web del entramado Silversalud ha desaparecido de Internet, pero puede consultarse como estaba el 2 de junio de 2013 en el Internet Archive.
Apreciable señor Delclós,
El pasado 1º de marzo se publicó en la sección de moda de El País un artículo bajo el encabezado "¿Dormir con el móvil en la mesilla de noche? No, no, no." firmado por Natalia Martín Cantero.
El artículo de El País con la correspondiente fotografía conspiranoica. |
El señor Fernando Pérez no es médico, ni científico. Es presidente de Geosánix y también vicepresidente de la Fundación para la Salud Medioambiental, ambos parte de una amplia red de la empresa Silversalud, que crea organizaciones, fundaciones y empresas para dar la impresión de que hay una amplia oposición a las radiaciones electromagnéticas no ionizantes como lo admiten en su sitio Web
http://www.silversalud.com/es_ES/Fundacionesyempresas.aspx
aunque anteriormente tenían un organigrama mucho más amplio:
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEieDO6QGxS0YRrxMU9tzhyphenhyphenu6AhM0I0WFC1rb4c6rpvTDsAduJT5GDlDUQzHoMfJeEvAz-_Nx1t1LKoV0MtWaywo8crtBOfgQ-rF8MOxVwFCrEzC6CoYX0_WxQhSRnCpu1JVmhQ1/s1600/Screen+Shot+2011-10-10+at+11.11.07+PM.png
El señor Pérez dice que está "formado en Salud geoambiental por el Instituto Forschungskreis für Geobiologie", o sea, el "Grupo de Investigación sobre Geobiología", un pequeño negocio iniciado por el médico alemán Ernst Hartmann, para la difusión no de la medicina, sino de la radiestesia (zahorismo o ritual mágico para encontrar cosas con un palito o un péndulo), feng-shui, radiónica y otras patrañas. No es una universidad, y lo más que imparte son pequeños seminarios de zahorismo a distancia por entre 100 y 350 euros:
http://www.geobiologie.de/
Todo esto lo puede averiguar cualquier periodista que contraste las fuentes de las que está tomando información para determinar si son fiables, válidas y adecuadas.
Pero lo más importante es que todas las afirmaciones sensacionalistas de Geosánix-Silversalud van contra lo que la ciencia, la física, la medicina, la epidemiología, la oncología y otras disciplinas saben.
Lo remitiría a los siguientes blogs científicos que citan abundantes fuentes:
http://blog.evolutionibus.info/2011/10/14/alguien-miente-sobre-las-antenas/
http://medikuntzakoikasleak.com/2011/10/10/las-ondas-del-mal-y-la-humildad-del-cientifico/
http://brucknerite.net/2011/10/%C2%BFescuelas-sin-wifi.html"
http://blogs.elcorreo.com/magonia/2011/10/11/el-origen-del-panico-electromagnetico-sigan-el-dinero/
http://www.migui.com/opinion/desmontando-a-la-fundacion-para-la-salud-geoambiental.html
http://www.migui.com/opinion/las-redes-wi-fi-danan-a-los-arboles-y-el-amor-en-el-mundo-%C2%BFpor-que-no.html
http://amazings.es/2011/10/11/inaki-ucar-y-juilan-palacios-los-moviles-matan-cuando-llega-la-factura-amazings2011/
y a mi modesto blog en el que abordé este tema como perdiodista:
http://charlatanes.blogspot.com.es/2011/10/el-negocio-del-miedo-electromagnetico.html
Por todo esto, creo que se puede esperar de El País no sólo que mantenga en el futuro una actitud más crítica ante los promotores de diversos tipos de pánico anticientífico, especialmente en temas de salud (antivacunas, negacionistas del SIDA, vendedores de curaciones alternativas no contrastadas científicamente, neoliberales de la salud pública), sino que ofrezca a su público en el mismo espacio y lugar una contrarréplica de verdaderos científicos y expertos en el tema que puedan dar información sólida, contrastable y verificada, que es de lo que se trata la ciencia. Esto especialmente para quienes por leer el diario en papel no tuvieron acceso a la muy estimulante reacción de los lectores en los comentarios de este lamentable artículo de pseudociencia y conspiranoia, y que puedan haberse convencido de adquirir alguno de los igualmente cuestionables productos que ofrece Geosánix para "protegerse" de este peligro indemostrado:
http://tienda.geosanix.com/