febrero 20, 2009

Preguntas a los inquilinos del más allá

Siempre me han parecido interesantes todas las supuestas comunicaciones con el más allá, con la gente que ya murió y por tanto, nos dicen, sigue viviendo sin cuerpo, con los que viven, no lo sabemos bien, en el infierno, el limbo, el cielo, el paraíso, el hades o algún otro lugar más o menos abracadabrante, o los entes del mundo élfico y feérico (de elfo y hadas, pues), o seres procedentes de otros mundos con civilizaciones asfixiantemente superiores a las nuestras.

Lo que hace interesantes esas supuestas comunicaciones no es lo que dicen, sino lo que no dicen y, en contraste, el tremendísimo circo, paripé, teatro, aspaviento y show que desarrollan los supuestos intermediarios entre los muertos (o los espíritus elementales, o los dioses, o los etés, o quienes sean los habitantes del "más allá" elegidos y sin importar dónde rayos esté ese "más allá") y su pobre cuanto frecuentemente pagador público.

¿Cómo se comunica uno con los entes del más allá? La variedad de procedimientos es asombrosa: desde la inocente ouija o la supuesta "escritura automática" hasta equipos de grabación más o menos complicados que pueden o no incluir aspectos de alta tecnología como dos coladores pegados o una supuesta antena hecha con un tupperware verde al que se le practica un orificio en el fondo para enchufarle un micrófono que no será parabólica, pero apantalla pendejos (o gilipollas) que es un primor. Pero el procedimiento más común es que el intermediario finja algunas convulsiones, eche la cabeza hacia atrás, ponga los ojitos en blanco y empiece a hablar impostando la voz, procedimiento que han empleado muchísimos médiums desde tiempos de Eusapia Palladino hasta J.Z. Knight, la empresaria que dice hablar poseída por Ramtha, un guerrero espíritu de 35.000 años de edad que le ha producido una fortuna suficiente como para producir (discretamente) la película de propaganda new age llamada "What the bleep do we know?" y traducida de varias formas, como "¿Qué rayos sabemos?"

Evidentemente las convulsiones y los ojos en blanco no son requisitos fundamentales. "Videntes" o "psíquicos" de gran éxito como John Edward se saltan esos pasos para proceder directamente a dar mensajes individualizados a quienes pagan por sus servicios.

Lo más raro de todo es que del enooooooooorme acervo de comunicaciones escritas o verbales de todos los médiums, psíquicos, canalizadores y psicofoneros del mundo, no contamos con muchos mensajes que fueran, digamos, convincentes. Por ejemplo, todo psicofonero (los que dicen grabar mensajes en cinta magnética) que se respeta le rinde pleitesía a Friedrich Jürgenson, el fundador de su peculiar práctica, pero a la hora de citar las impresionantes psicofonías o mensajes que logró reunir sólo citan cosas como: "Friedel… mi pequeño Friedel… ¿Puedes oírme?", palabras que afirmó haber grabado diciendo que tenían la voz de su madre. ¿Tanto ruido para tan pocas nueces? ¿Cinco palabras en español (quizá menos en alemán) y ya? Lo malo del tema es que las "psicofonías" que producen los seguidores del negociete de Jürgenson suelen ser tan poco impresionantes como "Sí", "¿Yo qué hago aquí?" o "Tengo miedo", mensajes que francamente no justifican las horas y horas de radio y televisión, y las toneladas de papel y tinta que se invierte en darle cera a los egos de estos personajes.

Olvídese de que probablemente muchas psicofonadas son fraudes y las que no lo son resultan pareidolias o identificaciones erradas (recuerdo una "psicofonía" de un "aterrador grito" obtenida por unos allanadores de morada junto a la vía del tren que va de Gijón a Candás y que es estremecedoramente idéntico al chirrido de las ruedas del tren en la curva de Aboño que pasa frente al lugar de la "misteriosa grabación"). Eso es lo de menos. Lo que resulta interesantísimo es que se nos diga que un espíritu descarnado invierte energía astral, sobrenatural o simplemente imaginaria para declarar contundentemente, como en cierto caso "Furcia" (zorra, puta, ramera, sexoservidora, obrera del sexo).

La escritura automática (que denominan también "psicografía", porque las palabras con la partícula "psico" les parece muy respetable, lo cual viene bien para diferenciarla de la escritura automática como forma de creación de los surrealistas) es otro procedimiento del cual se pueden tomar cualquier cantidad de cursos para aprender a hacerlo (uno supone que serían los entes del más allá los que deciden si uno puede o no hacerlo, pero no), libros sobre gente que la practica y los habituales numerosos artículos sobre lo que es la escritura automática, por qué se cree que procede del "más allá" y cosas similares. Pero de nuevo los mensajes son bastante bobos. Cosas como "aquí todo mundo es muy amado, es hermoso, tu papá está bien".

Más filosóficos son --o pretenden ser-- los mensajes que, nos dicen, provienen de los extraterrestres. Por ejemplo: "Yo Soy SaLuSa y les traigo un gran Amor de todos los miembros de la Federación Galáctica. Les invitamos a unirse a nosotros en la aventura maravillosa que está delante de todos nosotros". Lo que no dice es cómo se apunta uno, pero generalmente si se integra a la secta en cuestión y paga algunos cursos, libros, CD, DVD y conferencias, le cuentan la verdadera historia. Algunos profesionales como José Trigueirinho son capaces de darnos mensajes un poco más amenazantes aunque no menos crípticos: "La negatividad en el hombre podría magnetizar hacia el mismo la realización de estos eventos". No sé que es, pero acojona. O "Los extraterrestres disponen de recursos para un trabajo magnético que suaviza efectos de guerras atómicas pues conocen esos efectos y saben que éstos pueden alterar la estabilidad del planeta en el espacio, lo que afectaría al sistema solar".

Los mensajes, al parecer, se dividen así en tres categorías: los que son directamente ininteligibles, en apariencia bobos, breves e inútiles, los que son personales e intransferibles para una persona diciéndole que sus seres queridos están bien (pero sin decir nunca dónde ocultó el abuelo Federico el diamante que le birló a la Reina Victoria en cierta aventura que no trascendió) y son igualmente inútiles, y los que se dirigen a todo el mundo diciendo generalidades, vaguedades y que resultan igualmente inútiles.

Los entes del más allá tienen, como requisito sine qua non (que no significa "sin el pato", sino "imprescindible") saber más que nosotros. O porque vivieron en el pasado o porque son eternos o porque son extraterrestres capaces de logros que dejan a nuestra tecnología en un triste ridículo.

Y sin embargo, ni los médiums, ni los canalizadores, ni los psicofoneros, ni los ouijeros (qué raro suena), ni ningún otro intermediario esotericón suele hacer preguntas más o menos relevantes sobre la sabiduría de tales seres.

Si yo mañana descubriera que estoy "canalizando" a un guerrero etrusco de hace 2.500 años, le preguntaría sobre cosas que me parecen relevantes. No necesito que me diga que mis familiares están bien si sobreviven en un universo alterno, no tienen por qué estar mal si ninguno era realmente malvado (aunque tengo algunas tías que merecían un severo correctivo en preparación a la eternidad, pero nada más). No necesito que me diga que contaminar está mal y que la paz es preferible a la guerra, cosas que a mí me parecen de una obviedad que quita el hipo. Por el contrario, le preguntaría sobre la organización social y política de las ciudades-estado etruscas, la ubicación de algunos restos etruscos relevantes y los fundamentos del idioma etrusco, que nos permitirían entender su civilización. Y por encima de todo le preguntaría sobre la fundación de Roma y los contactos de los etruscos con Grecia, que permitieron que la cultura griega llegara a Roma y continuara en el nuevo imperio.

La verdad, si mi espíritu canalizado considerara que la esposa de Lucius Tarquinus Sextilius es o no una furcia me resultaría poco interesante.

Las preguntas que se le ocurren a uno, quizá por no ser místico esotérico ni comulgar con ruedas de molino, son muy distintas de las que se hacen (o dicen hacerse) supuesto "investigadores" de lo "paranormal" como la tertuliana profesional y conferenciante Sol Blanco-Soler o la tarotista Paloma Navarrete, afiliadas al Grupo Hepta, que narran historias en extremo emocionantes sobre sus andanzas en sitios supuestamente embrujados, comunicándose con muchos entes y seres, pero de los mensajes recibidos no dan mucha cuenta, quizá por ser los mismos rollos de siempre, aburridos e irrelevantes.

Mucho canto y nada de ópera, pues.

Supongamos que nuestro ente del más allá es un muerto de poca monta, un sencillo trabajador de la segunda mitad del siglo XX que no nos puede dar información novedosa sobre su época histórica, bien documentada. Al menos podría hablarnos de qué se siente estar muerto, dónde rayos está, cómo se ve sin ojos, cómo se oye sin oídos, cómo se transporta sin pies ni autogiro (o cómo es el autogiro preternatural), cómo se habla sin boca (asunto éste que ya le llamaba la atención a Da Vinci, que antes que un místico crédulo y esotérico era un pensador serio que dice en uno de sus libros de notas: "... podemos afimar que el espíritu no puede producir una voz sin movimiento de aire, y en él no hay ninguno, por lo que no puede emitir lo que no tiene". Pum, pam y paf), hay luz o no hay luz, cómo es dios, cuántos muertos ve, si existen los idiomas o puede conversar con muertos chinos, si ha hecho amistad con algún constructor de la Gran Pirámide, del acueducto de Segovia o cuando menos de la Plaza de las Ventas... en fin, mucho podríamos aprender.

Si realmente fuera posible comunicarse con inteligencias del más allá, lo razonable sería preguntar miles y miles de cosas que los "profesionales" de esta estafita centenaria nunca se han tomado la molestia de preguntar. Y uno se pregunta, a su vez, ¿por qué será?

febrero 17, 2009

Augurios, astrología, espíritus, maldiciones

Tengo que aclarar que no tengo ningún interés especial en la India ni en las supersticiones de ese herido país tercermundista respecto de otros. Sus supersticiones (consideradas "sabiduría" por personas que deberían estar mejor enteradas) no son distintas, ni mejores, ni más sabias que las de los londinenses del siglo XVI, de los aborígenes australianos, de los japoneses, de las múltiples etnias indígenas americanas o que las de los mormones de Utah hoy en día.

Pero una miseria monumental (hija de la colonización, sin duda), una ignorancia extendidísima y unas fuertes creencias sobrenaturales se conjuntan con la brutal sobrepoblación para que sea fácil encontrar en la India ejemplos de lo dañino que son las supersticiones, orientales, occidentales, norteñas o sureñas. En este caso, la creencia en la astrología, los espíritus, los augurios y demás aspectos esotéricos convierte a una niña con unos simples dientes supernumerarios en un monstruo peligroso a ojos de su comunidad.

Y así lo encontramos en el periódico El Mundo el día de ayer.
Casan a una niña india con un perro para salvarla de los malos espíritus
Efe | Nueva Dheli
Actualizado lunes 16/02/2009 11:33 horas

Una niña de doce años ha sido casada con un perro para protegerla de los "malos espíritus" que la amenazaban en el estado indio oriental de Jharkhand, informó un clérigo tribal local.

El casorio, celebrado este domingo en la localidad de Jamshedpur, se llevó a cabo porque la menor había desarrollado piezas dentarias adicionales, algo considerado como un mal augurio por la población de la zona, explicó el sacerdote Naresh Manki, citado por la agencia IANS.

"En una sociedad tribal, que una mujer desarrolle dientes complementarios es considerado un mal presagio no solo para ella, sino también para los miembros de su familia y para toda la sociedad. Para salvarla de los malos espíritus, la casamos con un perro", dijo Manki.

La pequeña Soni ha tenido que afrontar los atípicos esponsales por ser una "manglik", una persona astrológicamente maldita para el matrimonio, según la tradición hindú .

"El enlace se celebra como una boda normal, también se organiza un banquete para aquellos que participan en la ceremonia", añadió el clérigo.

No es la primera vez que en la India se celebran matrimonios entre hombres y animales o incluso árboles, ya que algunos astrólogos creen que ello libera a la persona contrayente de ciertas maldiciones o de la mala suerte que le han asignado los astros.

Ni siquiera las estrellas de la poderosa industria del cine indio, Bollywood, escapan al influjo de estos atavismos.

A finales de 2006, la actriz y miss Mundo Aishwarya Rai, también una "manglik", tuvo que casarse simbólicamente con la imagen del dios hindú Vishnú como paso previo para poder desposarse con la también estrella del celuloide bollywoodiense Abhishek Bachchan.

De nuevo, uno no puede sino concluir que no hay peor maldición que la ignorancia, la superstición y los "iluminados" que viven en el ego trip.

febrero 13, 2009

Orina y odio religioso

Si a usted le gusta beberse su propia orina jugándose la vida y cortejando el mal gusto, además de ir contra la naturaleza de su cuerpo, le encantará saber que el Departamento de Protección de las Vacas del movimiento hindú nacionalista Rashtriya Swayamsevak Sangh (RSS), está a punto de lanzar una nueva bebida de orina de vaca.

Según informa The Times de Londres, Om Prakash, encargado del departamento, informó que la bebida, llamada "gau jal", que en sánscrito significa "agua de vaca" está en pruebas de laboratorio y se lanzará quizá a finales de este año.

Don Om Prakash asegura que no olerá a orina y será sabrosa, cosa que seguramente podrán constatar los esotéricos de cafetería que bien conocemos. Además, será "saludable" y no será como las (malévolas, supongo) bebidas carbonatadas y además estará "libre de toxinas". Como la urea es una toxina, es de suponerse que se la quitarán, lo que deja el problema de que los creyentes en la orinoterapia o urinoterapia se beben sus propios desechos corporales sin quitarles la urea, con lo que si tienen algún problemilla de gota o insuficiencia renal pueden pasar un verdadero festival de horrores de salud.

La orina y las heces de vaca juegan un importante papel en la superstición indostana, y los fieles creyentes los consumen (en serio) en rituales para "purificar" a quienes están en las escalas inferiores del sistema de castas indostano.

En 2001, todo según The Times el RSS, que tiene además su partido teocrático, el Bharatiya Janata en la oposición, empezó a promover la orina de vaca como una cura para enfermedades que van de las afecciones del hígado a la obesidad e incluso el cáncer.

Por supuesto, lo que nadie se pregunta es en qué casta ubican los fanáticos nacionalistas hinduístas a los no indostanos que pretenden adscribirse a sus creencias y aceptar ciegamente sus supersticiones (lo que llaman "seguir la sabiduría milenaria de la India").

Una pista: el odio nacionalista y religioso oriental no se diferencia en nada del occidental. El desprecio por los que "no son como nosotros" es igual en el nacionalista fanático estadounidense, vasco, hutu, indostano, japonés, etc. Porque el
problema es el nacionalismo fanático y no la nacionalidad ni la etnia.

El movimiento que nos divierte con su oferta de vendernos meados de bovino como bebida refrescante, actúa también violentamente. El año pasado, en el estado oriental de Orissa, en la India, fueron responsables del asesinato de 67 cristianos, además de atacar a un grupo de mujeres en un pub de Mangalore el mes pasado.

Los asesinatos de cristianos son promovidos ofreciendo dinero a los grupos exaltados ultranacionalistas. Según otro reportaje de The Times, la recompensa actual por matar a un pastor católico es de 250 dólares (£170), y la superstición y el odio religioso mantienen a 11.000 cristianos confinados en campos de refugiados en Kandhamal. A su vez, la guerrilla maoísta mató a un líder hindú, pero los hindús acusaron a los cristianos, al parecer por conveniencia.

Parece que se ratifica que el odio religioso, la superstición ignorante y los delirios irracionales, nunca dan buenos resultados, vengan de donde vengan.
Gracias a Luis Daniel Carbia por enviarme el ureico enlace a The Times.

febrero 10, 2009

Otro triunfo de la "medicina alternativa"

La "medicina" natural, alternativa, holística, complementaria, antioccidental, tradicional, milenaria y ecológica se ha cobrado otra víctima.

En el mundo de las creencias no comprobadas de la brujería disfrazada de medicina, la orina es considerada un "líquido mágico". Distintas tradiciones le adscriben distintas capacidades mágicas, desde la protección de la piel hasta la curación de huesos rotos, como antibiótico y según algunos audaces hasta como anticancerígeno. Sujetos que lo ignoran todo acerca de la fisiología del cuerpo humano y la biología molecular, como el brujo español Jesús María "Txumari" Alfaro y el embustero mexicano Shaya Michán afirman consumir su propia orina con efectos según ellos muy beneficiosos, aunque el espectador detecta que parecen igual de tontos que si no bebieran sus desechos corporales.

La orinoterapia, urinoterapia o meadoconsumo es, además de una porquería, una práctica bastante peligrosa. La orina es el vehículo mediante el cual el cuerpo humano se deshace de ciertos desechos tóxicos del metabolismo celular, como la urea, de sustancias tóxicas consumidas, como drogas y venenos, de expulsar el sodio o potasio excedentes de modo que el pH del cuerpo se mantenga en el nivel adecuado para la vida y manteniendo el equilibrio ácido-básico de nuestro metabolismo. Los riñones, esos complejísimos mecanismos que no suelen estudiar los "alternativos", filtran 180 litros de sangre diariamente, extraen lo que no nos sirve, recobran (ellos mismos, sin necesidad de médicos ayurveda) las sustancias que sí nos sirven (como la glucosa). No hay ningún motivo posible o imaginable desde el punto de vista médico para volver a meter lo que el cuerpo ha echado fuera.

Nada de esto conmueve a los defensores de las terapias más delirantes, como ésta, con resultados esperables pero no menos trágicos. Este martes, numerosos diarios reproducían esta nota de EFE, que reproducimos del diario mexicano El Universal:

EFE
EL UNIVERSAL
LA PAZ MARTES 10 DE FEBRERO DE 2009
08:40
Una mujer boliviana falleció por una infección generalizada después de que una amiga le inyectara orina en el suero cuando estaba ingresada en una clínica de la ciudad oriental de Santa Cruz, informaron hoy los medios.

G.G.A., de 35 años, murió el viernes debido a una septicemia (infección generalizada) después de que una amiga le inyectara orina para aplicarle orinoterapia, una supuesta técnica con propósitos curativos o cosméticos, afirmaron los fiscales al diario La Razón.

La víctima ingresó el pasado miércoles en la clínica cruceña en la que falleció dos días después cuando era sometida a una operación de abdomen.

"Cuando le practicaron la incisión, identificaron un cuadro de septicemia. Se complicó la intervención quirúrgica y falleció el viernes", informó al diario paceño el fiscal de distrito de Santa Cruz, Jaime Soliz.

Según Soliz, el ingreso de la orina en la sangre puede provocar la muerte, a causa de la septicemia, de inmediato o máximo en 72 horas.

"Varía, depende del estado físico, la nutrición, el estado inmunológico, la muerte se podría prolongar, hasta 72 horas, si es que no es inmediata", indicó.

La mujer fue ingresada tras haber sido intervenida quirúrgicamente en Chile para reducir el tamaño de su estómago.

"En la clínica, su padre descubrió in fraganti que la amiga de su hija, quien aparentemente es diseñadora de modas, le colocaba orina en el torrente sanguíneo", dijo Soliz.

El fiscal asignado al caso, Óscar Flores, explicó que según las pesquisas preliminares, la mujer habría inyectado orina a su amiga para practicar la orinoterapia porque "seguramente quería que se sintiera mejor de salud, por que ya antes tuvo una complicación".

Por su parte, Soliz, que negó cualquier responsabilidad de los médicos que trataron a la paciente, apuntó que la investigación "está siendo complicada" porque los familiares de la víctima no están colaborando, mientras que la presunta autora de la inyección de orina, que ha sido citada para declarar, está desaparecida.

jigh


Compare esto con tonterías egregias como la siguiente, tomada de un directorio de clínicas privadas de España que no menciona, claro, a sus dueños (que son, por cierto, lo bastante astutos para esconderse detrás de un registrante en volumen de Arizona que oculta su identidad, DomainsByProxy.com), y que recomienda el siguiente tratamiento para las heridas abiertas: "Utilice orina propia, de vaca o de caballo para realizar toques, con un dedos o algodón, regulares y durante un prolongado período".

Si obtiene una septicemia, asunto suyo, claro.

El ridículo de la religión

Entre el trabajo, una amenaza de muerte de parte de algún bobo firmando "Amigos de OSHO" ya denunciada a la policía con todo y la IP de Ono desde la que se envió, salidas para tomar fotos y un nuevo perro, se van juntando entradas pendientes para este blog. La primera y que me parece más relevante es el documental Religulous, del cómico Bill Maher, aunque no espere usted demasiada comedia en este documental, cuyo objetivo es demostrar no sólo lo absurdo que son las creencias religiosas sino, sobre todo, su enorme peligro y el costo que están teniendo los fanatismos en vidas humanas, igual en Irak que en Madrid, Nueva York, Gaza, Israel, Londres, Holanda, etc.

Recomendable no sólo para ateos, sino para los que no lo son, especialmente si les ha parecido que el "bus ateo" es más ofensivo que la pederastia sacerdotal o los terroristas suicidas.