El mundo de lo alternativo y lo paranormal, aliado a lo contracultural y el relativismo posmoderno es el mundo del miedo: a los transgénicos, al mal de ojo, a las vacunas, a los extraterrestres, a los médicos, a los teléfonos móviles, a la leche, a los conservantes, a los pesticidas, a la desalineación de los chakras, a los antibióticos, a los illuminati, a los judíos, a las "toxinas", a los homosexuales, al fin del mundo, a los masones, a los musulmanes, a los espíritus, a comer carne, a las mujeres libres, al pensamiento, a la crítica, al agua, a los hechos, a los medicamentos, al wifi, al tendido eléctrico, al "desequilibrio energético"...
El temor razonado, basado en hechos, datos y evidencias es otra cosa. El temor nos permite enfrentar los problemas y solucionarlos. El miedo irracional de la superstición nos paraliza y nos pone en manos de quienes lo promueven.